Crónica de cómo Error Tipo 1 capturó a Osama Bin Laden, y por qué los medios tradicionales se rehúsan a admitirlo

El prisionero parece gozar de buena salud y en general tener una actitud positiva respecto a la vida

En Error Tipo 1 deseamos expresar nuestra consternación por la abominable cantidad de desinformación con la que los medios de comunicación y el gobierno mundial han embobecido a la gente de este planeta, respecto a los hechos concernientes a la captura y actual condición del sujeto apodado Osama Bin Laden.

La nunca confiable plataforma Google ha llegado incluso al punto de marcar un punto al azar en el mapa como el supuesto “centro de operaciones” en el cual fue apresado y “asesinado”, datos que no son verídicos y atentan contra la verdad histórica y la libertad de expresión que el mundo necesita para entender a cabalidad los hechos ocurridos en los últimos meses. Condenamos estas aberraciones mediáticas, y decidimos romper el cerco desinformativo y una vez más llevarles a la cama la verdad en bandeja, decorada con un pequeño florero con rosas y una cara sonriente en el café: Osama Bin Laden está vivo, y fue capturado en la Luna.

 LA CAPTURA 

What do you mean, "Error Tipo 1 approaching"?

Como primer punto, es importante especificar que Osama Bin Laden no fue hallado en Pakistán, y mucho menos fue la captura un logro de un equipo de inteligencia estadounidense.

La verdad es que fue un largo proceso de varios meses difíciles, en los que ninguno de nosotros podíamos estar seguros de si volveríamos o no a nuestro hogar. Sin embargo, sabíamos que teníamos una misión adelante, y que la Humanidad dependía de nosotros. Sospecho que lo que nos mantuvo vivos a mí y a todo el comité de científicos encargados con la misión de capturar vivo a Osama Bin Laden fue saber que no habría refuerzos, no llegaría un segundo equipo, y nadie lavaría los platos cuando estemos muy cansados. Estábamos solos en el medio del Mare Cognitum, y no existía la opción de no llevarnos a Bin Laden con nosotros.

También entendimos que nuestra historia no sería nunca contada por los medios de comunicación “oficiales”. Sabíamos que probablemente negarían la existencia de las bases militares lunares, y en cambio le pusieran un chinche a un punto cualquiera en el mapa y dijeran “¡Aquí está!”. Por supuesto, comprendimos que nuestros nombres jamás serían mencionados, y menos aún los nombres de los otros científicos, aquellos que murieron en el viaje clandestino, en la primera batalla en el cráter Cleomedes, la emboscada en Mare Crisium, asesinados por los fantasmas del Pantano del Sueño, o en la fiesta que se salió de control en Sinus Iridium. Pero eso no nos importaba. Estábamos acostumbrados.

Al final todo valió la pena, cada uno de los sacrificios, todas las muertes, y el orinar en un traje espacial. Bin Laden y su ejército de robots finalmente cayó en el cuadragésimo tercer día de batalla. El ser que puso en jaque al planeta Tierra cayó de rodillas y lloró como una niña cuando lo arrestamos. Lo trajimos a este planeta en una pieza y lo encerramos en el búnker subterráneo de Error Tipo 1. Misión cumplida.

Hemos visto en los últimos días a los políticos de distintos países adjudicarse la captura, declarar su asesinato y hasta incluso acusarnos de ser sus cómplices. Pero nosotros sabemos la verdad, y con eso nos basta. Y dejamos este testimonio, para que las generaciones futuras puedan, quizás algún día, saber toda la verdad.

 EL PRISIONERO 

Osaba Bin Laden parece ser capaz de respirar bien en la Tierra, pero solo por precaución hemos aumentado los niveles de metano y nitrógeno en su celda. La capa lubricante que cubre su piel se ha secado un poco, pero no podríamos esperar menos bajo el nivel de stress en que se encuentra. No creemos que esto sea peligroso en las condiciones actuales, pero tenemos al Dr. Schttlotemwich encargado de su salud. El resto nos dedicamos a conseguir información.

La tortura ha sido terrible, tanto para él como para nosotros, pues nunca fue parte de nuestro juramente lastimar a criaturas extraterrestres. Sin embargo, es una necesidad, pues el prisionero se ha rehusado sistemáticamente a cooperar con nosotros, y el tiempo apremia.

Lo primero que pudimos sacarle fue que, a diferencia de lo que los organismos de Inteligencia habían informado, Osama Bin Laden no proviene de Libia o Arabia Saudita, sino que su especie evolucionó en Júpiter, específicamente en una capa gaseosa de metano a la que llaman Ajzztr’jbl, donde han construido una gigantesca civilización flotante de millones de años de antigüedad, pero que solo hace unos 70 años descubrió el capitalismo como justificación para la invasión planetaria a gran escala, razón por la cual ansían con ojos baboseados nuestros bellos y vírgenes paisajes naturales.

Lo segundo que este Bin Laden nos dijo, es que ha estado trabajando EN COLABORACIÓN con el gobierno estadounidense desde que su nave espacial cayera en Roswell, Nuevo México, en 1947. Desde entonces, los Bin Laden y Estados Unidos han estado detrás de todos los grandes asesinatos y atentados terroristas, crisis nucleares, sobredosis de celebridades, caídas de la economía mundial y la programación de aproximadamente 97% de los canales de televisión en colores, su más nefanda obra.

Por eso no nos sorprende que Estados Unidos haya dicho que el extraterrestre más buscado del mundo estaba muerto y no más preguntas debían hacerse al respecto. A diferencia de Saddam Hussein, que era de una sub-especie inferior, los Bin Laden son una importante raza guerrera e intelectual, con amplios conocimientos tecnológicos que los caucásicos del Norte no quieren que sean divulgados a la comunidad científica. Si se descubriera la cura para el cáncer, ¿quién pagará la quimioterapia? Si se aprende cómo impulsar un auto con aire, ¿Quién financiará las vacaciones de los magnates petroleros? No, Osama Bin Laden debía morir. Pero Barack Obama y la OTAN no contaban con que Error Tipo 1 también tuviese acceso a una nave espacial, y como el lanzamiento de la nave Endeavour fue suspendido (LO CUAL no FUE CULPA NUESTRA), los gringos nuevamente llegaron tarde a la fiesta.

La última información que hemos conseguido extraerle al ser del Planeta Júpiter fue una lista de entes que circulan con libertad por la Tierra pero que son especímenes de la raza de los Bin Laden, muchos de los cuales han adquirido poder político, religioso, militar, mediático, plástico y deportivo, y que son agentes pasivos esperando a ser reactivados por la orden precisa (llamada Plan 9) para atacar a la Humanidad y robarnos el planeta.

La lista incluye nombres como Benedicto XVI, Elton John, Barack Obama, Nicolas Sarkozy, Steven Spielberg, Ollanta Humala, Noam Chomsky, Cristiano Ronaldo, Pablo Zalaquett, Milla Jojovich, Rafael Nadal, Angela Merkel, Quentin Tarantino, Benedicto XVII (criogenizado), Charlie Sheen, Paul Vásquez, Mark Zuckerberg, Umberto Eco, Nelson Mandela, Usain Bolt, Chinoy, Naomi Klein, Jean-Claude Van Damme, todos los miembros de Arcade Fire, Kate Middleton, Natalie Portman, Mario Kreutzberger, Vladimir Putin, Silvio Berlusconi y otros muchos nombres que cada día logramos extraerle a la criatura. Sorprendentemente, Muammar Gaddafi no fue mencionado, lo cual nos hace pensar que es uno de los últimos líderes humanos que valientemente resisten la invasión extraterrestre.

Este ente es un extraterrestre. Si lo encuentra, no vacile en usar la fuerza, aunque llorando pida un mínimo de clemencia.

Gracias a toda la información que hemos podido reunir, es evidente que esta invasión no es solo inminente, ya empezó. Es hora de que, como Humanidad, decidamos pelear por nuestro estilo de vida, nos desabrochemos el cinturón, tomemos las armas, reconquistemos nuestro destino y volvamos a disfrutar el aroma de las flores. Somos el más grandioso planeta en el Sistema Solar, somos la única especie con libre albedrío y... otras cosas más que nos hace fascinantes. Esta nueva información, obtenida gracias al sacrificio de muchos científicos y unos cuantos vaqueros arriesgados, puede darnos la cantidad justa de ventaja que necesitamos. Hoy será el día en que la Humanidad peleará de vuelta. Hoy, será nuestro Día de la Independencia.

Y tú, ¿Dónde estarás?